En un acto marcado por fuertes críticas al pasado reciente, el presidente Rodrigo Paz aseguró este martes que el antiguo Ministerio de Justicia “murió” tras haberse convertido —según afirmó— en “el ministerio de la injusticia, de la persecución, de los intereses del chantaje y de la venta de sentencias”. Sus declaraciones se produjeron durante la posesión de Yamil García como nuevo Viceministro de Transparencia.
Paz sostuvo que la misión del renovado viceministerio será reconstruir la confianza ciudadana en la justicia y garantizar seguridad jurídica, en un país donde “el Estado era el dueño de la justicia y de la economía”. Subrayó que uno de los principales objetivos será “acabar con el Estado tranca” y promover una economía con reglas claras para todos los sectores, bajo el concepto de “capitalismo para todos”.
El mandatario resaltó que estas transformaciones deben consolidar un escenario en el que “Bolivia vaya al mundo y el mundo venga a Bolivia”, con respeto a la propiedad privada, los derechos humanos y la transparencia en todos los niveles del Estado.
Paz también presentó su visión de desarrollo regional basada en el esquema “50-50”, que busca otorgar mayores recursos y capacidades a los nueve departamentos para frenar la migración interna hacia el eje central.
Dirigiéndose directamente a García, señaló que su designación forma parte de “la respuesta que le estamos dando a Bolivia” y que, tras dos décadas de un sistema sin resultados, el desafío principal será “entregar una justicia renovada”.
“Murió el Ministerio de Justicia y ahora tenemos que entre todos colaborar para sacar una nueva visión de la justicia”, concluyó.
